domingo, 27 de enero de 2013

Flores de pensamientos comestibles

Hay un truco que siempre viene bien para añadir una nota diferente a tus platos y sorprender a tus invitados: añadir flores comestibles a tus platos.

Normalmente cuando se habla de flores comestibles se nos vienen a la cabeza dos principalmente, los pensamientos y las caléndulas. Nosotros nos vamos a ocupar hoy de los pensamientos.



Los pensamientos son la flor de una planta vivácea muy fácil de cuidar, famosa porque se suele usar en jardinería pública en meses fríos, cuando ninguna otra planta sirve para decorar rotondas o jardines.

Para usar pensamientos para uso gastronómico, tenemos que tener en cuenta que no nos sirven los que compramos en un vivero y recién hemos plantado en nuestro jardín, ya que estos pueden tener herbicidas o productos fitosanitarios nocivos para nuestra salud. Lo suyo es empezar a usar estas flores, si provienen de plantas adquiridas en un vivero, cuando pasen al menos un mes después de haberlas sembrado en nuestro jardín (siempre y cuando no hayamos nosotros añadido productos por nuestra cuenta)

Otra opción que sería la más acertada, antes que dedicarnos al cultivo, es comprarlas ya preparadas para cocina. Normalmente vienen sin tallos verdes y en una cajita pequeña donde vienen flores de diversos colores, siendo las amarillas las más comunes.

La forma habitual de presentar estas flores es:
  1. Directamente, poniéndolas sobre el plato o aliñadas como ensalada
  2. Rebozadas, con una fina tempura por ejemplo, con la intención de que se vea el color de la flor. 
Tenemos que tener en cuenta que el efecto de las flores de pensamiento es ligeramente laxante, lo cual quiere decir que no debemos de abusar, ingiriendo una gran cantidad de ellas de golpe.

Recetas con flores de pensamientos:
Ensaladas de flores y mollejas 

Mermelada de arandanos rojos, un complemento rápido y que da a los platos un sabor diferente

Ya sabéis que en SimplyFiesta nos gusta mucho hablar de esas cosas que nos hacen la vida más fácil a la hora de preparar pequeñas fiestas, y la mermelada de arandanos rojos es una de esas cosas que da los platos donde se dispone un sabor especial.



Siendo sinceros, el primer contacto que tuve con la mermelada de arándanos rojos fue el día que inaugurarón el Ikea que tengo cerca de casa. Nunca antes las mermeladas para mí había despertado mucho interés.

Allí compré la "Sylt Lingon", que es mermelada de arándanos rojos que cuesta 2,50€. Vamos a conocer un poco más de esta baya, el arándano, y los usos que os sugerimos:

+ EL ARÁNDANO ROJO

El arándano es un arbusto pequeño que crece en las zonas frías del hemisferio norte, siendo una planta muy común en norteamérica, lugar donde se cultiva de forma industrial, principalmente en de Massachusetts y Nueva Jersey. El arándano rojo crece en turberas ácidas, en lugares que normalmente se inundan, momento en el cual los frutos se desprenden, y quedan flotando en el agua, medio que usan para expandirse.

Cuando se recolecta, la mayoría de la producción mundial va destinada a producir zumos, salsas o mermeladas, y sólo un 5% se destina a venderse fresco en los lugares de producción.

+ PARA QUÉ SIRVEN

Los arándanos rojos se utilizan desde hace siglos con fines medicinales, sobre todo para prevenir y tratar enfermedades del tracto urinario.

+ DONDE USAR LA MERMELADA DE ARÁNDANOS ROJOS

Os dejamos algunos sitios donde aplicar la mermelada de arándanos rojos y que añadirá sabor al plato donde sea colocado, además de color, y un toque rápido diferente.




  • CANAPÉ: A los clásicos biscotes con queso de untar, añádele un poco de mermelada de arándanos por encima. Es un sabor que combina perfectamente y que a todos suele gustar. 
  • PURÉ: Haz un puré de patatas y añádele albahaca, y cuando lo sirvas, pon a su lado un poco de mermelada de arándano para mezclarlos cuando cojas un poco de puré. 
  • CARNE: Queda muy curioso como acompañamiento de alguna carne a la brasa, como contrapunto dulce a un alimento normalmente salado. 
  • TARTA DE LIMÓN: Si haces tarta de limón, prueba a ponerle una cobertura de esta mermelada. El ácido del limón y el sabor del arándano, que no es demasiado dulce, casan bien. 

sábado, 19 de enero de 2013

Kit Cupcake, ideal para regalo

¿ No sabes qué regalar ? Pues aprovechando la moda que hay actualmente de los cupcakes que mejor que, para una persona que sea aficionada a la cocina o que se le de bien, un regalo así. Lékué nos trae "Kit Cupacke", un kit muy completo y con un atractivo diseño que lo hacen ideal para un regalo  o para un detalle. Incluye además, recetas diferentes y decoraciones distintas para todos los cupcakes. 

Trae además de los moldes de silicona para tus cupcakes, el llamado "Decomax" que hace las funciones de la manga pastelera de toda la vida sólo que gracias a su diseño ergonómico puedes tener más manejabilidad a la hora de dejar mensajes, hacer dibujos, flores y en definitiva, todo lo que tu imaginación te permita.
Además en la propia página de Lékué podemos encontrar muchas recetas para usarlas con sus productos. 

jueves, 17 de enero de 2013

Receta de galletas de mantequilla con chocolate

Hoy os traemos una receta facilísima de las típicas galletas de mantequilla que se hacen en un momento y que son bastante efectivas y muy ricas. Nosotros además le hemos agregado el toque del chocolate para hacerlas más atractivas.

Ingredientes 
- 150 gr de mantequilla
- 100 gr de azúcar
- 1 huevos
- 250 gr de harina
- 1 cucharadita de esencia de vainilla.
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- pepitas de chocolate (al gusto)

Elaboración

1. Siempre que usemos la mantequilla en algún dulce nos dice que esté a temperatura ambiente pero cuando nos ponemos a la hora de hacerla muchas veces la hemos tenido en el frigorífico así que lo mejor es cortarla en trozos y meterla en el microondas para que se quede más blandita. Sólo unos segundos y estando pendiente y mirando mucho como va para que no se nos quede líquida total. En ese caso con esperar un poco que se enfríe es suficiente. ¡ que no cunda el pánico ! . Ponemos la mantequilla ya blanda en un bol y añadimos el azúcar mientras lo batimos para que se vaya mezclando.


2. Añadir el azúcar mientras se bate la mantequilla.



3. Agregar el huevo y la esencia de vainilla. Seguir removiendo.
4. A continuación añadimos la harina (nosotros siempre la tamizamos para que le de más esponjosidad a la receta) y seguimos batiendo. Aquí agregamos la levadura y las pepitas de chocolate. Cuando tengamos la mitad de la harina echada podemos seguir amasando a mano hasta que no se nos quede pegada en los dedos. Tampoco debe de quedar dura. Algo intermedio.



5. Dejamos reposar la masa en el frigorífico tapada con film transparente
6. Precalentamos el horno a 180º y mientras ponemos la masa entre dos papeles de film transparente y con la ayuda de un rodillo formamos una lámina fina de, aproximadamente medio centímetro de grosor.



 7. Apartamos el film de arriba y procedemos a cortas las galletas. Las vamos colocando con mucho cuidado en una bandeja de horno antiadherente o sobre papel de horno.



8. Sobre los 10 minutos o 15 ya están listas o hasta que las veamos doradas pero no del todo. Cuando las saquemos del horno y estén un poco frías para poder manejarlas y no quemarnos procedemos a derretir las pepitas de chocolate que con unos segundos se derriten superrápido. Con ayuda de una cuchara o un cuchillo de untar podemos ir decorando las galletas a nuestro gusto y podemos agregarle almendras o fideos de colores ( o lo que queráis ). Os quedarán deliciosas y muy simpáticas para cualquier ocasión.